En las ludotecas de Arrigorriaga empezamos el curso cargadas de energía y con muchas ganas de seguir aprendiendo. Esta semana hemos participado en la jornada en torno a esta forma de violencia ejercida en el entorno familiar organizada por Lamiaena, la Casa de las Mujeres de Arrigorria, y el Ayuntamiento. Con una charla impartida por Alba Barbé y Laia Pibernat, autoras del cuento La bici de Lola en el que tratan conceptos como resiliencia, reparación o revelación de secretos; y una sesión formativa a la red de profesionales del municipio que como SOINHEZI trabajan con la infancia y adolescencia desde sus diferentes ámbitos.
Aprender a detectarla para ayudar a combatirla
No solo es una de las formas más graves de violencia contra la infancia y la adolescencia sino también una de las más ocultas y rodeada de tabús.
Como dicen las autoras del libro La bici de Lola en su charla “Violencia sexual infantil en la familia: cómo detectarla y acompañar” celebrada en la Casa de Cultura Edurne Garitazelaia (Arrigorriaga), cualquiera debería poder hablar con niñas y niños sobre este problema. A través de una bici, un timbre y un grupo de amigos proporcionan una herramienta para hacerlo en un tema para el que faltan recursos.
Las ludotecas, como espacios de juego, menos rígidos que los entornos académicos, puede favorecer que niñas y niños se abran facilitando con ello la identificación del problema.
8 de cada 10 casos de abusos se dan en el entorno familiar
El último estudio de Save the children lo confirma. En la gran mayoría de casos de abusos sexuales contra la infancia en España el agresor es una persona conocida o del entorno familiar. Este estudio se ha realizado a partir del análisis de cerca de 400 sentencias sobre este tipo de violencia.
Más datos del informe de Save the children: la edad media a la que empiezan los abusos son los 11 años. La victima en su mayoría es una niña o una adolescente (el 80,3% de los casos analizados). El 96% de los abusadores no tiene antecedentes penales relacionados con la violencia sexual. Se estima que solo 15% de los casos se denuncia.
En general, se tiende a pensar que estos casos no existen ya que si esto sucediese en nuestro entorno nos daríamos cuenta.
Por todo ello, es fundamental la detección y acompañamiento a las víctimas para luchar contra esta violencia que existe, aunque permanezca oculta.